jueves, 31 de marzo de 2011

19 - Marzo - 2011 La Mira


El grupo en la cima de la Mira cubierta en su totalidad por la nieve.



Hoy es el día del Padre, y después de felicitar a los que lo son, salimos con dirección a Navarredonda, en donde daremos buena cuenta del café y de las magdalenas que Félix suele llevarnos el día que viene con nosotros de marcha.
Como no queremos tentar a la suerte y debido al día que es y a lo bueno de la climatología, decidimos no llegar hasta la plataforma (pues creemos que estará abarrotada de gente) y quedarnos y empezar la marcha, desde el Kilometro 6.
Como no sabemos muy bien que nos encontraremos ni el tipo de nieve (aunque lo presumimos), metemos de todo en la mochila, e iniciamos la marcha.



No queremos llegar a la Mira por los sitios de costumbre y como en esta época de año y las condiciones de la sierra se presta a ello, decidimos cambiar el camino y adentrarnos en terrenos que normalmente son impracticables por la cantidad de piornos que hay.
Desde un primer momento tomamos el camino que conduce al Puerto de Peón



pero más tarde viraremos a nuestra derecha (a la altura del Charco del Cura) y tomaremos una arista cubierta por la nieve, que en otras circunstancias seria imposible subir por ella.



Cruzamos las diversas gargantas que jalonan el camino



y después de ponernos los crampones, iniciamos la subida por la arista que nos conducirá a la zona alta que más tarde crestearemos.



Inicio de la subida con el Charco del Cura, al fondo, cubierto por la nieve.



Desde abajo, la zona que elegimos para subir parecía más corta y menos empinada, pero nada más lejos de la realidad; parece que no vamos a llegar nunca arriba y el camino requiere de nosotros un esfuerzo constante.



Como consecuencia de todo esto, el grupo se va disgregando y cada uno se impone a sí mismo su ritmo, con el fin de no llegar agotados arriba.


Ya vemos el final de la subida


y vamos llegando poco a poco.



Con el fin de descansar unos minutos, hacemos en lo alto una pequeña parada y de paso reponer fuerzas ingiriendo algo de fruta.



Reanudamos el camino y vamos dejando a nuestras espaldas la zona del puerto del Peón; ahora nos toca crestear un poco. Las condiciones de la nieve son perfectas en esta zona y esto hará que nuestra marcha sea más ligera.



Pasamos por zonas en la cuales la ladera se inclina bastante y requiere de nosotros una mayor concentración.



Ya tenemos a la vista la zona de atrás de los Galayos y seguimos el camino con dirección a la Mira.



A nuestras espaldas podemos ver las Canales Seca y Reseca, asignatura pendiente para alguno de los Pisapraos.



El cielo esta despejado, luce el sol



y esto hace que desde cualquier ángulo la vista de los picos cubiertos por la nieve, sea impresionante.



La inquietud de alguno hace que siempre este oteando el paisaje en busca de nuevas rutas que hacer.



Ya estamos llegando y esto hace que el grupo se vaya reunificando para llegar todos juntos a la cumbre.



La cima esta totalmente cubierta por la nieve, y después de unos momentos de asueto, iniciamos el descenso



pasando lo más cerca posible de la zona que da vista a las cimas de los Galayos.



La busqueda de un sitio para comer seco y no cubierto por la nieve, se hace tarea casi imposible, por lo tanto intentaremos tomar algo de pie.



No bajaremos por el mismo sitio de la subida, sino que iremos por la parte opuesta, intentaremos buscar otra arista en la parte contraria de la zona del Charco del Cura,



Encontramos un hueco entre una zona de piedras y esto nos pareció bien para iniciar la bajada.



Las chicas Pisapraos en lo alto de la arista y detrás de ellas la zona que anteriormente habíamos cresteado.



El grupo en animada charla, bajando cómodamente la pendiente.
La nieve a esta hora de la tarde estaba en bastante peores condiciones y...



esto hacía que alguno metiera las piernas hasta las rodillas, con el consiguiente cachondeo de los demás.



Vamos llegando a la zona desprovista de nieve, nos quitamos los crampones e intentamos superar, sin caernos, las gargantas que bajan con bastante agua.



Estamos cerca de los coches y vamos dejando atrás las aristas nevadas que anteriormente habíamos tenido que superar.



Ha sido una marcha larga y vamos con ganas de quitarnos las botas, cambiarnos e irnos a tomarnos unas buenas jarras de cerveza.

NOS VEMOS EN LA PRÓXIMA.


1 comentario:

asun dijo...

Esta marcha a la Mira me gustó mucho y creo que la variación en el recorrido habitual fue muy acertada. La subida era espectacular y las fotos han conseguido mostrarlo. Eso está muy bien!!
Tengo una duda: Pablo de joven bailaba la jota? Es solo curiosidad ...