Hoy somos pocos pero coj......
Los Pisapraos en el Refugio del Rey.
Llegamos a la Plataforma de Gredos y nos encontramos con que toda ella está helada y con nieve, aparcamos el coche lo mejor que podemos e iniciamos la marcha en un magnífico y soleado día.
Subimos por la calzada y aunque no hay mucho hielo ni mucha nieve, alguno de nosotros se enfunda los crampones por si acaso.
Subimos al Prao Pozas y cogemos el camino que nos llevara hasta la Piedra Del Descanso.
Las vistas de la sierra son fantásticas y nos animamos a hacer fotos en todas las posturas posibles y tomar el mejor encuadre.
Como a alguno se le olvidaron los crampones en el coche, los resbalones estuvieron a la orden del día, pues debajo de una fina capa de nieve había grandes zonas con hielo.
Según nos íbamos acercando a Navasomera, las condiciones climatológicas iban cambiando y se nos iba acercando una niebla bastante densa que nos dificultaba la visión de la sierra.
Pisando nieve virgen.
Llegamos al alto de Navasomera...
y el frío y la niebla continúan dificultando nuestra marcha, así que decidimos posponer la subida al Morezón para otro día e iniciamos el descenso camino del Refugio del Rey.
Intentamos nos salirnos de las huellas marcadas, pues las placas de hielo abundan en esta zona, y de esta manera hacer que la marcha sea lo más cómoda posible.
Poco a poco nos vamos acercando al Refugio en donde haremos una parada para comer.
Buscamos el mejor lugar para refugiarnos pues hace bastante frío, por lo tanto intentamos conseguir la mejor orientación para que no nos de el aire.
Espero que esta foto sirva para denunciar la poca solidaridad que va quedando en la montaña, esto ya no es lo que era.
Estando nosotros acabando de comer, nos dispusimos para tomar café, en esto que llegaron 3 montañeros a los cuales no conocíamos pero que saludamos haciendo gala de una educación exquisita.
Como nosotros eramos sólo cuatro y el termo bastante grande, después de habernos tomado unas tazas de café, nos sobro líquido elemento y como a nuestro lado había unos compañeros aprovechamos para ofrecerles un poco de nuestro café, a lo que accedieron de muy buen grado; les llenamos un cazo que llevaban y les dimos azúcar y cucharillas.
Mientras todo esto acaecía, ellos sacaron de sus mochilas un infiernillo y diversos productos alimenticios (tales como unos extraordinarios torreznos), los cuales empezaron a cocinar. El aroma que emanaba ya de por sí alimentaba pero no fueron capaces de ofrecernos, ni siquiera decirnos que si gustábamos, así que con mal sabor de boca pero con buen olor, dejamos el refugio y continuamos nuestra marcha.
Para hacer un poco más larga la marcha, decidimos dar la vuelta por el Puerto de Candeleda.
El Grupo pasando por encima de la Canal de La Ribera con el Pico del Fraile al fondo.
Llegamos hasta el hito que marca el Puerto de Candeleda y echamos una mirada y no más pues es frío y el aire nos golpean con fuerza, por lo tanto la parada se hace corta y reemprendemos la marcha.
A veces la nieve cubre los hoyos del caminos y el caminar se hace dificultoso, así mismo hay que ir salvando los distintos arroyos que jalonan el camino.
Ya de vuelta otra vez a la calzada, nos disponemos a llegar a la Plataforma, coger el coche e ir a ver a Roberto para que nos suministre un poco de bebida y comida.
2 comentarios:
Parece mentira que en la montaña haya personas tan insolidarias. Pero por suerte, la verdadera realidad es otra, lo normal es encontrarse con gente dispuesta a ayudar cuando hay alguna complicación y compartir lo que se tiene. Esta es la esencia del montañero y de las buenas personas.
Ciertamente, todos solemos ser solidarios e intentar ayudar, lo de este día fue solamente una anécdota y un hecho aislado, pero es que nos sentó muy mal pues los torreznos olían que alimentaban.
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