Habíamos quedado en el lugar de costumbre y todos nos presentamos sin una idea muy clara de que marcha íbamos a hacer hoy, nos mirábamos unos a otros y nadie decía nada.
Visto el panorama, decidimos ir a desayunar a Barco de Ávila y allí veríamos que hacer, pedimos nuestros cafés y nuestros churros; pero las ideas no afloraban. Hablamos de hacer la garganta de Navamediana y alguna que otra cosa, cuando a Marino se le ocurre decir que porque no vamos a la Laguna Negra, lugar maldito para algunos pues ya subimos a este lugar alguna vez y no logramos encontrar la laguna.
Desde Barco nos dirigimos hasta la Central Eléctrica de Solana de Ávila; aparcamos el coche en el lugar habilitado para tal fin y después de echarnos la mochila a los hombros, iniciamos la marcha, pero hoy no subiremos a la Laguna del Duque por la zona de tubos, sino que cogemos a nuestra izquierda la trocha, que bordeando unas grandes rocas, nos llevará hasta la misma Laguna.
Durante la primera parte de la marcha, no hay nada de nieve, pero arriba en la cumbres ya se atisba la nieve, esperemos que no este blanda y se pueda andar bien.
Dejamos atrás la laguna, y empiezan las dificultades. Lo primero una larga y empinada subida que además es bastante pedregosa y que al estar estas cubiertas de nieve harán más costosa y peligrosa la subida.
La nieve cubre las piedras y hace que estas estén bastante resbaladizas por lo que en algunos tramos tenemos que ayudarnos los unos a los otros para poder superarlas.
Vamos llegando al final de la subida en pequeños grupos; el esfuerzo ha sido importante y en estas situaciones, cada uno intenta coger su ritmo para hacer mejor la marcha.
Hacemos una pequeña parada para esperar a la gente que falta y también para ponernos algo más de ropa de abrigo, ya que la niebla hace acto de presencia.
Bordeamos por su parte izquierda un enorme prado, dejamos a un lado un pequeño refugio y continuamos la marcha en dirección a la Laguna Negra.
Creemos que ya estamos cerca...
pero todavía nos quedan alguna que otra subida importante y la nieve cada vez esta más blanda.
Ya estamos, según los gps, muy cerca y hay que otear bien el paisaje para intentar ver la laguna pues, aparte de que es pequeña, estará cubierta por la nieve y nos impedirá localizarla bien.
Como todas las piedras están cubiertas por la nieve, localizamos un sitio resguardado y bien de pie o sentados en una manta térmica, intentamos comer algo.
Iniciamos el camino de vuelta e intentamos tomar otro camino un poco más alto, con el fin de evitar las laderas inclinadas que anteriormente habíamos pasado.
Fin de la bajada, la Laguna del Duque ya está muy cerca; ya sólo nos queda superar una zona de piornal.
NOS VEMOS EN LA MARCHA PARA CELEBRAR LA NAVIDAD (ESTE AÑO CON ALGO DE RETRASO)
1 comentario:
¡por fin llegamos a esta laguna! y sigo sin conocerla. Tenemos que volver sin nieve.
La marcha fue preciosa.
Un saludo a todos. Pseudónimo
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